lunes, 28 de mayo de 2007

MUJERES, PROPIEDAD DE TODOS



“Tengo 20 años, vivía en Misiones, todo comenzó cuando estaba con una amiga, también está acá, ella tiene 14 años. Se nos acercó un taxista que no conocíamos en mi pueblo, nos dijo que necesitaba dos empleadas para una casa de familia en Capital Federal, cuando nos interesamos en el trabajo este señor nos llevó a “El Dorado” a hablar con Inés, ahora está detenida junto a sus cómplices, ella nos dijo que la familia no había especificado un sueldo, a mi amiga y a mi nos entusiasmó la simple idea de poder pisar Buenos Aires, sin pensarlo, nos emprendimos en la aventura. Ese mismo día, un 4 de junio (2.005), nos subimos a un micro con Fabián, él era el que mandaba en este negocio.
Nada resultó como lo esperaba, de Buenos Aires pude ver poco y nada, cuando llegué no era una casa de familia lo que me esperaba, si no vestimenta a la cual me obligaban a usar, eran polleras cortas y botas altas, a veces ropa interior y botas, no podíamos comer, nos daban frutas, dormíamos por turnos y nos duchábamos por agua fría, si no atendíamos la cantidad de clientes que nos pedían, nos pegaban en la cara, nos lastimaban.”

La chica que cuenta esta historia llena de dolor se llama Marcia, lo que la salvó de esa pesadilla fue su valor al escapar del lugar donde estaban, un departamento en la calle Sucre. Corrió a pedir ayuda, denunció lo que le estaba pasando, y gracias a su fuerza salvó al resto de sus compañeras, muchas de ellas menores de edad.

La historia de Marcia la están viviendo en este momento millones de niñas y mujeres en cada país del mundo. Se las llama putas, prostitutas, gatos, viejas, depende de que país se trate. Se las carátula de “malas personas”, viven en una pesadilla, no son dueñas de nada, ni siquiera de su vida.

¿Quién se preguntó alguna vez por qué estas mujeres viven así? ¿Quién las caratulan de malas personas? ¿Con que derecho? ¿Quién está a cargo de todo esto? ¿Por qué un negocio tan negro sigue existiendo? ¿Quién ayuda a que sea así? Paso a contarles como comienza todo.

Muchos seres humanos piensan que las mujeres son objetos sexuales, y que sus cuerpos están absolutamente disponibles para cualquier hombre.

Aun en Europa o en Estados unidos, las grandes potencias del mundo, la prostitución y la trata de personas existe tanto como en los países subdesarrollados, Existe, ahí está, sólo cambia los protagonistas y el lugar, pero el acto siempre es el mismo: Una mujer que necesita trabajar, un hombre que se aprovecha de eso, le promete que sólo será por un tiempo, y todo comienza.

Cuando el engaño mata

Alguien muy generoso les ofrece un excelente trabajo a niñas y mujeres en condiciones precarias, sólo que queda lejos, si lo aceptan deberán cambiar de ciudad, de provincia, a veces hasta de país. Dejaran sus familias, amigos, su lugar, su vida. Ese “alguien muy generoso” les ofrece pagar el pasaje, pero deberá viajar ¡ya!, no hay tiempo de pensarlo ni de despedirse, o se acepta ese trabajo con la ilusión de ganar bien y poder ayudar a su familia o se queda en su ciudad sin posibilidades de progreso.

Se sabe la respuesta de esa mujer o jovencita, en su lugar simplemente será una desaparición, un jamás volveré, un adiós sin explicaciones; para la victima a partir de ahora habrá un nuevo lugar, nadie conocido, ninguna posible llamada y golpes que prometen lo peor para ella.

Una vez llegadas a su nuevo lugar son apartadas de sus cosas, documentos, pasaportes, documentación de la obra social, todo lo que acredite su identidad, ante los ojos de la justicia son inexistentes, ilegales, inmigrantes.

Para los hombres, son un objeto, una cosa, algo que deben usar y maltratar a su criterio, las obligan a prostituirse, deben hacerlo, no tienen donde ir, no pueden escapar, nadie les creería.

Esta es la nueva forma de esclavitud, la del siglo XXI, mueve 32.000 millones de dólares anualmente, es el tercer negocio clandestino más lucrativo del mundo, luego del tráfico de armas y el de drogas. Sólo en Europa, los clientes de estas mujeres, llegan al 50% de la población total.

Se considera a nivel mundial que hay 50 mil colombianas, 60 mil dominicanas y 75 mil brasileñas pueblan la industria sexual: entre el 10 y el 30 por ciento de ellas son menores de edad.
Los lugares de destino son Argentina, Capital Federal, la triple alianza de América Latina, diferentes puntos de Europa, los estados de habla latina de Estados Unidos, México, Suecia, China (en la película “Historia de una geisha” se ve claramente este manejo), entre otros puntos.

Ya sabemos quiénes son estas mujeres y en que se basan para elegirlas: deben ser personas en condiciones marginadas. También descubrimos que las quieren para prostituirlas. Ahora veamos que medidas se toman para ayudar a estas mujeres.

Podría comenzar a hablar simplemente de las leyes que se crearon o de la escasez que existe en medidas para prevenir la trata, pero antes, seria oportuno analizar estas situaciones en profundidad para entender hasta donde llega lo declinable del ser humano.

Al leer sobre el tema, surgen infinidad de interrogantes, tales como que se hace en caso de ser detectada la red, que leyes existen, que sucede con esas personas, según que ley se juzga al “tratante”.

Sólo en México, existen más de 126 redes que se dedican a diferentes formas de trata de personas, de esos grupos, que están formados por miles de personas, se dictaron 531 sentencias a pesar de que no se cuenta amplias leyes en contra de la trata, y por lo general los tratantes no son juzgados por este delito, sino por secuestro, privación ilegitima de la libertad y hasta por asesinato.

Aunque se crea lo contrario, esta práctica involucra muchos fines: la venta de niños; el turismo sexual; la pornografía; el tráfico de órganos; la compra de mujeres para diversas rutinas sexuales, como por ejemplo, la sumisión y el sadomasoquismo; la esclavitud de personas para trabajos en condiciones insalubres entre otras.

Los trabajos constan desde labores en fábricas, maquiladoras, trabajo agrícola, plantaciones, minas, construcciones, pesca, mendicidad, trabajo doméstico e incluso en los llamados “vientres de alquiler” y hasta para el trabajo de “mulitas”.

La trata con fines de tráfico de órganos consiste en la sustracción ilícita de órganos, tejidos o componentes, los cuales son principalmente el pulmón, riñones, córnea, hígado, corazón y huesos, para ser vendidos en el mercado negro.
Para ello se buscan personas preferentemente jóvenes y con buena salud, se secuestran, se les realizan exámenes médicos y por último los intervienen quirúrgicamente para extraer el órgano.
Cerca de las fronteras, la utilización mas habitual es la de “mulitas”. Ésta consiste en personas que deben cruzar a otro país con drogas.

¿De qué manera lo logran? Transportando en sus estómagos pepitas de diversas sustancias. Es una de las únicas maneras con las que no se detecta la droga. En algunos aeropuertos se está implementando un sistema de rayos x con el que es posible rebelar estas situaciones.

Nota: en el film “Maria llena eres de gracia” se puede apreciar el manejo de esta forma de narcotráfico

El hecho de que la trata de personas siga existiendo se debe a la falta de legislaciones que la penen. En los países donde aun no se sancionó una ley sobre tratantes, se debe legislar recurriendo a figuras del Código Penal como por ejemplo, explotación sexual y/o laboral.

La “Convención de las Naciones Unidas contra el Crimen Transnacional Organizado” es la responsable del impulso de que cada país comience a tener legislaciones en defensa de los afectados por la trata. Esto sucedió en un congreso realizado en Palermo, Italia en el año 2002.
Desde hace 10 años la OIM (Organización Internacional de Migraciones) está luchando para finalizar los delitos referidos a la trata y asistir a sus victimas, está, desde el 2004, creando programas de ayuda en los países considerados de alto riesgo.
Se crearon “listas” de los países mas riesgosos, en ella hay 127 países de origen, 98 de transito y 137 de destino de las victimas. En esta lista, una de las zonas mas riesgosas es América Latina, estando Colombia y México entre los primeros 20 países. Argentina es un país con un alto crecimiento en la trata. Estos tres son, generalmente las zonas de origen de las victimas. Esta lista se crea no sólo teniendo en cuenta el tráfico existente, sino también la ausencia o poca existencia de leyes.

En Colombia desde hace varios años la OIM creó programas específicos de ayuda. México ya cuenta con un marco jurídico para atender y proteger los afectados por la trata para cualquier edad y tipo de explotación sexual.

Con este acuerdo se modifica el artículo 2 de la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada y el 194 del Código Federal de Procedimientos Penales en lo que respecta a considerar a la trata como un delito grave, con lo que se limita el derecho de libertad bajo caución.

Susana Trimarco: una madre desesperada

Su hija, María Verón, desapareció el 3 de abril de 2002, sin dejar pistas o datos, simplemente sin rastros.

Desde entonces Susana Trimarco lucha por hacer lo que ni la justicia ni los medios hacen: busca sin descanso a “Marita”, y mientras lo hace descubre las redes de trata de personas que la justicia no ve o no quiere ver. Hasta el momento rescató a más de 86 mujeres.
En La Rioja, donde según las personas que vieron a Marita es donde estaba, esta mujer rescató a 19 mujeres del negocio de Liliana Medina. Para que trabajen mas eficazmente las golpeaban, drogaban, y amenazaban con matar algún miembro de la familia.

Ya pasaron 4 años desde la desaparición de Marita, pero Susana no pierde las esperanzas, lucha y espera con ilusión el llegar hasta donde está su hija. Espera pero sigue luchando para que todas las familias que están en su condición, puedan volver a ser lo que fueron algún día.

Florencia Penacchi

Florencia tenía una vida normal, nada fuera de lo común, sin conflictos aparentes, más que los conflictos familiares que todos tenemos. Era estudiante de economía, tenía amigos y una vida por delante.

Desde su desaparición los investigadores de la causa afirman que no fue secuestrada, sino que está viviendo en el interior del país junto a un hombre, ¿No les parece muy sugestivo que desaparezca de un momento al otro? ¿Se iría dejando todo? ¿Sabiendo que la están buscando desesperadamente no llamaría aunque sea para tranquilizar a su familia y amistades?

Supongamos que sea como los investigadores suponen, ¿NADIE LA VIO Y PUDO AFIRMAR QUE ES ELLA?

Si analizamos el caso en profundidad y lo comparamos con los casos de mujeres secuestradas para la trata, veremos muchas semejanzas. Demasiadas.

Conclusión

Desde el lugar de periodista no pretendo saber más que las personas involucradas en la causa, pero desde el lugar de lectora, no puedo parar de preguntarme por qué se esconden tantas cosas frente a hipótesis no muy creíbles.

En un momento se dijo “para qué preocuparse tanto sobre una mujer desaparecida, sólo es una más de las miles que hay”, este comentario es muy frecuente cuando desaparece una persona de bajo nivel socio-económico, sobre todo si es una mujer. Pero todo cambia cuando el que desaparece es un hombre, todo cambia cuando existe dinero. Todo cambia, para peor, cuando es una mujer. Entonces, ¿Somos todos iguales ante los ojos de la justicia?

1 comentario:

Anónimo dijo...

HOLA ROMINA G ME HE VUELTO ADICTO A LO QUE ESCRIBES, TU SABES TODOS LOS ELOGIOS QUE TENGO PARA TI, EN EFECTO CON ANTERIORIDAD YA HABIAS ESCRITO SOBRE ESTE TOPICO, UN TEMA QUE EFECTIVAMETE TODO SABEMOS QUE EXISTE, PERO QUE NADIE HACE NADA PARA COMBATIRLO, Y MAS AUN MUCHAS AUTORIDADES LO SOLAPAN, ES UNA LASTIMA EL SUFRIMIENTO DE ESAS MUJERES Y POR ENDE EL DE SUS FAMILIAS. TE DEJO UN RESPETUOSO BESO, CON ADMIRACION Y RESPETO LUIS GARCIA.

|